Incluso en momentos de crisis como el actual hay sectores que siguen creciendo a buen ritmo, ajenos al bajón del consumo y de las inversiones empresariales. Uno de ellos es el sector del deporte: los usuarios de gimnasios e instalaciones deportivas no paran de aumentar y cada día se necesitan más profesionales para atenderles: técnicos de fitness, monitores de actividades dirigidas, socorristas, entrenadores personales, etc.

Dónde estudiar

El primer requisito para entrar en este mundo es tener los conocimientos adecuados. La opción académica más obvia es la licenciatura de ciencias de la actividad física y del deporte, pero el acceso a esta carrera ?tradicionalmente conocida como INEF, por las siglas del Instituto Nacional de Educación Física? no siempre es fácil.

Los centros del INEF en Barcelona y Lleida, por ejemplo, ofrecen unas 270 plazas y reciben entre 600 y 700 solicitudes cada año. El acceso depende no sólo de la nota de selectividad, sino también de una serie de pruebas físicas.

La de actividad física y deporte es una licenciatura de contenidos genéricos que abre las puertas a muchos sectores de actividad, pero los alumnos pueden especializarse a partir del ecuador de la carrera. Existen itinerarios de docencia, salud, rendimiento, medio natural, gestión… Las ?ltimas promociones, además, empiezan a tener conocimientos muy concretos de fitness junto a las materias más tradicionales.

Además de la formación universitaria, la formación profesional de grado superior y la formación no reglada son otras vías de acceso al sector deportivo, aunque las materias que se imparten en estos ámbitos son muy diferentes en algunos aspectos a las que ofrece la universidad.

En la FP existe un ciclo formativo de grado superior en animación de actividades físicas y deportivas, que capacita para coordinar actividades deportivas recreativas como las acuáticas y las de tipo extraescolar.

En el campo de la formación no reglada hay una larga lista de centros privados, algunos de mucho prestigio, que forman monitores para todo tipo de actividades: fitness, aeróbic, musculación y culturismo, steps, spinning, actividades acuáticas… Esta formación especializada también se puede recibir en instituciones como la Federación Española de Aeróbic, que expide titulaciones federativas que, si bien no son oficiales, sí están reconocidas por el Ministerio del Interior.

Dónde buscar trabajo

Hay muchos campos en los que un profesional del deporte puede encontrar trabajo. Los más destacados son:

? Docencia: obtener una plaza de profesor de educación física en la ESO es la salida más tradicional para los licenciados de los centros del INEF, pero en los ?ltimos años las convocatorias de plazas son escasísimas. El mercado está prácticamente saturado.

? Gestión deportiva: Las instalaciones deportivas, sean p?blicas o privadas, necesitan tener al frente a profesionales con formación en gestión de empresas. El crecimiento de este sector en los ?ltimos años ha traído consigo, de hecho, la creación de varios masters profesionales especializados en gestión de entidades deportivas.

? Rendimiento: una salida profesional que ?ltimamente está ganando importancia -aunque a?n es muy minoritaria- es la preparación de deportistas de elite. Quien quiera dedicarse a ella tendrá que profundizar, eso sí, en conocimientos de medicina del deporte y de rendimiento físico.

? Monitores y entrenadores: quizá el área de actividad que más está creciendo en la actualidad. En un gimnasio de cierta envergadura podemos encontrar monitores para actividades infantiles; técnicos en fitness que supervisan el entrenamiento de los usuarios en las salas comunes; profesores de actividades dirigidas como steps, funky, spinning, aeróbic o tai-chi; fisioterapeutas e incluso entrenadores personales que en horas concertadas se dedican a cada cliente de manera individual.

Condiciones laborales

Los monitores y entrenadores acostumbran a cobrar en función del n?mero de horas trabajadas, de manera que no siempre les resulta fácil llegar a vivir exclusivamente de este trabajo.

Por una hora en la sala de fitness suelen ganar entre 9 y 15 euros, una cifra que se eleva fácilmente hasta los 18 euros en el caso de las actividades dirigidas. Y es que no requiere el mismo esfuerzo atender consultas sobre el funcionamiento de las máquinas o la posición más adecuada para hacer un ejercicio que dirigir una clase de aeróbic.

Algunos gimnasios de barrio pueden pagar sueldos superiores a la media, porque el hecho de tener instalaciones más modestas y horarios limitados de apertura reducen sus costes de mantenimiento. Los grandes gimnasios, sin embargo, ofrecen más estabilidad laboral, variedad de clases y más horas de trabajo en sala, además de mayores posibilidades de promoción.

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