La mayoría de los trabajadores que busca empleo en vacaciones está compuesta por jóvenes que intentan tener un primer contacto con el mundo laboral. Se trata de la mejor forma de abrir el camino hacia nuevos proyectos laborales. Sólo hay que analizar qué oportunidades ofrece el mercado.

Una «reanimación laboral». Eso es lo que, según Adecco, experimenta el mercado de trabajo entre junio y septiembre. Una época que puede suponer la gran oportunidad de encontrar trabajo para aquellos estudiantes sin experiencia profesional. De hecho, para el director Regional de Selección de Adecco, Alberto Gavilán, a lo largo de estos meses la persona que busca trabajo responde al perfil de «estudiante o persona que quiere dar sus primeros pasos en el mundo laboral, que quizá lleva estudiando todo el año y le apetece trabajar para ganar un dinero extra».

Trabajar en verano es, según la citada ETT, una forma de iniciarse en las responsabilidades que vienen asociadas a un empleo, así como de conocer el funcionamiento de la empresa y su composición. Se trata de la «época más propicia para encontrar un empleo de manera temporal», advierte Gavilán. Y, por ello, es mejor momento para poner en práctica toda la formación teórica y obtener la experiencia que abrirá caminos a nuevos proyectos profesionales.

Joven y con idiomas

Los jóvenes son, en definitiva, los más susceptibles de triunfar laboralmente en verano. Eso sí, unos más que otros.

En vacaciones existe un perfil cada vez más definido de contratado, que Adecco resume en el de una persona de hasta 25 años y con idiomas. La ETT ha notado durante los últimos ejercicios un incremento cada vez más acentuado de jóvenes estudiantes que ven en el verano la gran oportunidad de dar el salto al mercado de trabajo.

El año pasado, el 39,5 por ciento de los contratos que se suscribieron a través de Adecco correspondieron a jóvenes de hasta 25 años, mientras el 21,93 lo firmaron personas de entre 26 y 30 años. Por sexos, los hombres acapararon el mayor número de contratos al suscribir el 60,91 por ciento de ellos, cifra superior a la media del resto del año (51).

Otra de las conclusiones a las que ha podido llegar la ETT es que la demanda de personal con conocimientos de idiomas es cada vez más pronunciada, situación motivada sobre todo por el incremento de turistas extranjeros que visita España en época estival. De ahí que la demanda se centre sobre todo en personas que respondan a este perfil para ocupar puestos vacantes de animadores bilingües o trilingües en hoteles y parques temáticos, y de personal de atención al cliente en zonas costeras y turísticas del país.

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