Por tercer año consecutivo, la variación interanual de la oferta de empleo cualificado ha aumentado, concretamente un 23 por ciento en relación al año anterior. Éste es el dato más relevante del informe presentado por Infoempleo a partir de 215.701 ofertas de trabajo que han servido para conocer en qué situación está y hacia dónde se encamina el actual mercado de trabajo.

A nivel geográfico, Cataluña ha perdido la primera posición del ranking regional de oferta de empleo después de tres años de liderazgo. En su lugar, Madrid vuelve a ser la comunidad autónoma con más demanda de profesionales en toda España. Sin embargo, su crecimiento ha sido solamente de un punto respecto al año 2005 y su aportación al conjunto nacional no llega al 20 por ciento. Los sectores de las telecomunicaciones y banca e inversión son algunos de los que han seguido una evolución positiva en Madrid durante los últimos doce meses.

Andalucía se ha consolidado en la tercera posición del ranking y se ha visto favorecida por la progresiva dispersión geográfica de la oferta, rebasando el 10 por ciento de la demanda. El peso de la construcción en esta comunidad autónoma es abrumador (una de cada cuatro ofertas proviene de este sector), lo que hace de Andalucía una de las regiones de mayor especialización de España. Por otro lado, Aragón también ha aumentado su peso relativo en el último año gracias a la construcción, que representa el 17 por ciento de las ofertas de la región.

Del resto de comunidades autónomas españolas cabe reseñar el crecimiento de Castilla-La Mancha y Cantabria, dos comunidades que tradicionalmente se habían destacado por su baja aportación global. También Navarra, La Rioja y Asturias han mejorado sus números de peso relativo, todo lo contrario que Castilla y León, Euskadi y la Comunidad Valenciana, donde han disminuido las ofertas de empleo.

La construcción se desmarca

Por sectores, un año más (y ya van cinco), la construcción ha sido el principal demandante de profesionales en nuestro país. En esta ocasión, además, ha batido su propio récord con casi el 11 por ciento de las ofertas, doblando al segundo sector de la lista (el de las consultorías). Aunque se caracteriza por una presencia bastante homogénea, destaca en Andalucía, Madrid, Cataluña y Castilla y León. Y se trata del sector con mayor grado de especialización en la demanda de titulados: el 90 por ciento. Su buena salud ha impulsado al tercer puesto a una actividad afín, la inmobiliaria.

Por el contrario, uno de los descensos más acusados ha sido el de la industria ligera. Con una pérdida de peso relativo de casi un punto, ha descendido del segundo al cuarto puesto de la clasificación sectorial. En general, los sectores industriales representan el 34 por ciento de la oferta. Por último, las actividades relacionadas con el sector servicios suman el 49% del total, consolidando su creciente importancia en la economía española. Sus ofertas se concentran principalmente en Madrid y Cataluña.

El informe también facilita los resultados agrupados por las cuatro grandes áreas funcionales: comercial, producción, soporte y tecnología. La comercial aglutina el 37 por ciento del conjunto de la oferta, tres puntos menos que en el ejercicio anterior. En la función de producción o fabricación, los resultados se revelan positivos, llegando al 33 por ciento (el porcentaje más alto desde 1998). En cuanto al soporte (administración, recursos humanos y servicios generales), una de cada cuatro ofertas publicadas procede de esta función. Y finalmente la función tecnológica ha estabilizado su contribución a nivel estatal con un 3,7 por ciento; se espera que a partir de ahora su crecimiento sea estable.

Menos ofertas para los técnicos superiores

Más del 80 por ciento de las ofertas de empleo cualificado exigen una titulación específica o un nivel formativo mínimo, siete puntos más que el año pasado. Esta evolución se asocia a un descenso de la oferta dirigida a empleados que ha favorecido la demanda de técnicos, mandos intermedios y directivos.

Aunque el grupo de carreras más solicitado es el de las técnicas, que engloba a ingenieros y arquitectos, su demanda ha bajado sustancialmente y se sitúa en el 47 por ciento de las ofertas para universitarios, casi cinco puntos menos que hace un año y quince menos que hace dos. Por otro lado, las ingenierías generalistas (industriales y afines) acaparan el 19 por ciento.

Con el 35 por ciento de las ofertas se sitúan las carreras sociales. De éste área, cuentan con mejores salidas laborales las titulaciones relacionadas con la gestión empresarial. Además, se consolidan las carreras científico-sanitarias (casi el 15 por ciento de la oferta) y repuntan ligeramente las humanidades (2,4 por ciento) gracias a los estudios de filología.

La Formación Profesional, a buen ritmo

El 17 por ciento de la oferta analizada por Infoempleo solicita titulados de Formación Profesional. Sin embargo, sus titulados suponen más del 38% de las incorporaciones a empresas. Este dato es muy significativo acerca de las excelentes perspectivas de empleo de quienes se especializan en un oficio. Muchos de los candidatos ocupan el puesto laboral al finalizar allí mismo su período de prácticas.

La familia de Formación Profesional con más demanda es la de fabricación mecánica (25 por ciento), seguida de comercio y marketing; electricidad y electrónica; administración, y edificación y obra civil. El peso geográfico se concentra en las comunidades autónomas más industriales: Cataluña y Euskadi.

Crece ligeramente la demanda de candidatos que han cursado estudios de postgrado, pasando del 3,98 por ciento de 2005 al actual 4,18. En este sentido, son valorados en el 2,8 por ciento de las ofertas dirigidas a empleados, en el 5,9 de las que buscan técnicos, en el 4,5 de las dirigidas a mandos intermedios y en el 11,8 de las destinadas a directivos.

Por el contrario, lo que sí ha descendido ha sido el requisito de conocer idiomas para acceder a un empleo, concretamente del 31 al 27 por ciento. El inglés sigue siendo la lengua extranjera más solicitada (70 por ciento), seguida del francés (7,5) y el alemán (6,1).

Por su parte, la demanda de lenguas autonómicas se centra en las comunidades bilingües. De todas ellas, es Cataluña la que más valora su lengua vernácula (la requieren el 30,82 por ciento de las ofertas de empleo cualificado), por delante de Euskadi, si bien el euskera ha pasado del 9 al 17 por ciento. Dicha lengua también se pide más en Navarra (del 1,6 al 7,9 por ciento).

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