Miriam Maci? i Losada, consultora del ?rea de Recursos Humanos de Auren.

Septiembre ya está aquí y con él se inicia uno de los mejores períodos del año para buscar trabajo. Miriam Maci? describe la actual situación del mercado desde la perspectiva de Auren, una de las principales consultoras de RR.HH. de nuestro país.

Tras las vacaciones de verano las empresas retoman los procesos de selección y contratación de personal. ¿Con qué situación de mercado van a encontrarse quienes busquen trabajo?

Lo que venimos observando en Auren es que desde 2002 la oferta de empleo crece, como es tradicional, en determinados meses del año, principalmente septiembre y octubre, y más adelante durante enero y febrero, pero luego se estanca. Entre 2000 y 2002 llevamos a cabo muchos procesos de selección de personal, desde finales de 2001 hasta 2003 nos dedicamos más a la consultoría y a partir de 2004 hemos visto cómo volvía a aumentar la actividad en los procesos de selección, pero no de forma espectacular, el crecimiento de la oferta de empleo está siendo sostenido.

¿Qué perfiles profesionales están demandando las empresas?

Hay algunas actividades que han experimentado una fuerte demanda, concretamente todas las del ámbito comercial. En la actualidad existe una gran competencia en los diferentes sectores de actividad y eso hace que las empresas valoren cada vez más la figura del profesional de las ventas porque les resulta muy necesario, por eso ha cobrado una especial importancia hasta el punto de convertirse en un valor estratégico para muchas organizaciones.

Las empresas están buscando comerciales que las ayuden a ser más competitivas, ya no optan por personas que hagan diversas tareas, prefieren que se centren en las ventas. El trabajo comercial se ha profesionalizado mucho en los últimos años.

¿Son los comerciales los únicos profesionales que buscan las empresas?

Son los más demandados, pero también se precisan perfiles técnicos, por ejemplo de ingeniería y arquitectura y, en general de cualquier trabajo especializado, y también se requiere personal administrativo, que siempre es necesario en cualquier empresa.

¿Qué está sucediendo con los perfiles informáticos? ¿Vuelven a tener salida?

La demanda se ha recuperado, pero sólo un poco. En los últimos años las empresas han incorporado las nuevas tecnologías y no necesitan tantos profesionales del sector como hace un tiempo para instalarlas y desarrollarlas.

Durante el boom de Internet la contratación de informáticos fue masiva y cualquiera que tuviera unos mínimos conocimientos era válido, y además se le ofrecían sueldos muy altos, mientras que hoy el mercado es muy exigente con los perfiles tecnológicos. Ahora se les pide una formación y una experiencia específicas.

La alegría del mercado de años como 1998 o 1999 queda lejos, hoy cuesta mucho más encontrar trabajo que por aquel entonces y no sólo en el área informática.

Es cierto, pero no es sólo debido a la situación del mercado sino a que el nivel de exigencia de las personas que buscan empleo es hoy mucho más alto que años atrás. Ya no les interesa únicamente la posición y la retribución, además buscan una cierta calidad de vida, y eso es algo que persiguen tanto los directivos como el resto de profesionales que trabajan en las empresas, es una demanda generalizada.

La gente quiere tener vida personal, y en los procesos de selección a veces se te «escapan» candidatos porque hay alguna empresa que les ofrecen salir media hora antes. Matices como éste marcan cada vez más la diferencia a la hora de que un profesional se decida a cambiar de empleo.

¿Qué aspectos están valorando especialmente las empresas a la hora de seleccionar personal?

Además de unos requisitos mínimos específicos del puesto a cubrir relacionados con la formación y la experiencia laboral buscan cada vez más que el profesional posea ciertas competencias como la capacidad para aportar ideas, innovar, automotivarse y motivar a otros, ser muy resolutivo, crear nuevos escenarios, adaptarse a los cambios, etcétera.

A los perfiles más jóvenes se les pide sobre todo muchas ganas de trabajar y de aprender, mientras que en los profesionales con experiencia se busca la especialización, el conocimiento, el liderazgo, la implicación en los proyectos…

¿Qué condiciones de trabajo ofrece la empresa a cambio de lo que exige hoy a los profesionales?

La empresa lo que está ofreciendo actualmente son, por un lado, proyectos, la posibilidad de trabajar en algo interesante, y,por otro, compensaciones relacionadas con la calidad de vida, como la flexibilidad horaria.

En lo que respecta a la retribución, la tendencia es crear una parte variable vinculada a la consecución de objetivos individuales y de equipo. En los últimos años no ha habido grandes cambios en los salarios, no han crecido, se han mantenido, pero se está apostando por hacer que combinen el fijo con el variable para lograr una mayor implicación de las personas en los proyectos y objetivos de la empresa.

¿Cuál es su consejo para las personas que van a empezar a buscar trabajo a su regreso de estas vacaciones?

Aunque pueda parecer obvio, han de tener muy claro qué tipo de trabajo les interesa y en qué perfil de empresa les gustaría llevarlo a cabo. Y para saber si van a encajar o no en un puesto lo primero que han de hacer es leer bien la oferta de empleo. Antes las empresas publicaban anuncios indicando principalmente los requisitos de formación y experiencia, ahora suelen incluir también una lista de competencias o habilidades y eso puede dar una idea más clara de lo que se espera de la persona y de la filosofía de la empresa que ofrece el empleo.

La entrevista de trabajo es la fase clave en la selección de personal, ¿cómo debe prepararse?, ¿qué espera el entrevistador de un candidato?

Para nosotros es muy importante que el candidato sea sincero y eso se transmite cuando la persona ha reflexionado seriamente sobre el tipo de trabajo que le interesa y los valores y la filosofía que busca en una empresa. Luego, evidentemente en la entrevista hay que saber destacar los puntos fuertes que se poseen, lo que supone que previamente uno debe autoanalizarse.

Además, ha de estudiar bien lo que pide la empresa: qué competencias exige, cuáles se poseen y cuáles deberían mejorarse, etcétera. La persona ha de ser muy sincera con el entrevistador, pero sobre todo consigo misma, y para conseguir el puesto ha de insistir en los aspectos en los que destaca relacionados con el puesto a cubrir.

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