Para hacer de todo

La política del ‘todo vale’ ha dejado de ser efectiva en el sector de la construcción. Y es que, como indica el director general de la Fundación Laboral de la Construcción, Enrique Corral Álvarez, «se ha producido un intensivo fenómeno de especialización del trabajo que ha derivado en profesionales especializados en tareas muy concretas de las obras».

Como consecuencia, cada vez es más complicado encontrar a trabajadores polivalentes, «que son muy demandados por las empresas», subraya Corral. Se trata de profesionales con conocimientos en diferentes áreas del sector y con capacidad para actuar en varias tareas del proceso de construcción. Son, en definitiva, los que más posibilidades tienen de inserción laboral en este mercado.

¿Qué hay que hacer para ser un obrero polivalente? El director general de la Fundación Laboral de la Construcción sostiene que «la formación continua sería una buena herramienta para formar a trabajadores de estas características, ya que, dada su versatilidad, incidiría en aquellas capacidades menos desarrolladas de este profesional».

Variedad

Esta formación continua existe en todas las áreas de trabajo relacionadas con la construcción. Así, la Fundación Laboral de la Construcción cuenta con cursos orientados a actualizar los conocimientos de tareas como la de los instaladores, a los que ofrece programas de formación en los que, incluso, se pone al día en instalaciones solares a sus alumnos.

Los encargados cuentan con «formación oficial tradicionalmente asociada», como los cursos de grado superior relacionados con la edificación y la obra civil, propios de la Formación Profesional. La Fundación ofrece, en este caso, cursos sobre ‘Desarrollo y aplicación de proyectos de construcción’ y ‘Realización y planes de obra’. Y para los operadores de maquinaria, cuenta con cursos de maquinaria de movimiento de tierra y de operador de grúa torre, que preparan al alumno para poder obtener el carné oficial.

No obstante, Enrique Corral subraya, en este sentido, que el organismo cuenta con dos itinerarios formativos, «uno dirigido a formar a encargados de obra civil y otro destinado a formar a encargados de obra de edificación».

La Tarjeta Profesional de la Construcción

Este documento, conocido como TPC, acredita la formación del trabajador en materia de prevención de riesgos laborales.

El Convenio General del Sector de la Construcción 2007-2011 hace referencia, en su artículo 16, a la vigilancia y el control de la salud en este ámbito. Obliga a las empresas constructoras, por tanto, a proporcionar a sus trabajadores una vigilancia de su estado de salud en función de los riesgos que corren en su puesto, así como reconocimientos médicos periódicos.

Pero la prevención de riesgos no sólo debe proceder de la compañía. El trabajador debe poner su granito de arena con conocimientos específicos, cada vez más requeridos en este ámbito de trabajo.

La Tarjeta Profesional de la Construcción (TPC), creada por la Fundación Laboral de la Construcción, se impulsó, precisamente, para dar a conocer a la empresa la formación en prevención de riesgos que posee su trabajador titular. Pero, además, acredita la categoría profesional del empleado y sus períodos de ocupación en las empresas donde haya ejercido. Es, en definitiva, el DNI laboral del profesional de la construcción.

Más pros que contras

La TPC viene asociada a una serie de beneficios para el trabajador cualificado, pero también para la empresa, pues si sus empleados cuentan con ella puede certificar que éstos tienen una formación en materia de prevención, incluso los recién incorporados. Asimismo, la compañía puede comprobar que los trabajadores procedentes de empresas subcontratistas también disponen de la citada formación.

Se trata de un documento que puede abrirte la llave al mercado profesional de la construcción y permite a la empresa trabajar con todas las de la ley. Podrán solicitarla los trabajadores en alta o en situación de incapacidad temporal que presten servicios en empresas y desempleados que tengan acreditados 30 días como mínimo en entidades dedicadas a la construcción. Eso sí, para obtener la Tarjeta Profesional de la Construcción es requisito imprescindible haber recibido formación en materia de prevención de riesgos laborales.

Si te interesa, puedes solicitarla en persona en los centros de la Fundación Laboral de la Construcción, en asociaciones empresariales de la Confederación Nacional de la Construcción (CNC) y en federaciones sindicales de Construcción, Madera y Afines de Comisiones Obreras (FECOMA-CC.OO.) y de Metal, Construcción y Afines de UGT (MCA-UGT). También puedes tramitar tu solicitud ‘on line’ a través de la página www.trabajoenconstruccion.com o por correo, remitiendo el modelo que aparece en esta web a alguno de los citados centros.

La rehabilitación, todo un filón laboral

La antigüedad de las construcciones hará que la demanda se incline por profesionales que pongan remedio a los problemas que genere el paso de los años en los inmuebles.

España y, en general, todos los países del resto de Europa cuentan con una riqueza cultural arquitectónica que no ha sido inmune al paso del tiempo, como tampoco lo ha sido el patrimonio inmobiliario ni las infraestructuras que se han ido levantando en los últimos años.

Por ello, el director general de la Fundación Laboral de la Construcción, Enrique Corral Álvarez, prevé que algunos de los ámbitos que posiblemente tendrán más auge en cuanto a la creación de empleo será el de la rehabilitación, el mantenimiento de infraestructuras y la restauración.

En este sentido, el citado experto considera que «esta actividad, que es la más intensiva en mano de obra de toda la construcción, tiende a ser, en términos relativos, cada vez más costosa y, por lo tanto, va a suponer una parte creciente del total de facturación del sector y un importante yacimiento de empleo».

Novedades

Además de la rehabilitación, el sector de la construcción contará con nuevas salidas profesionales hacia las que también se inclinará la oferta de empleo. Es el caso de la instalación de sistema de eficiencia energética en los edificios, «fundamentalmente la puesta en la obra de paneles solares para producir agua caliente y electricidad o los modernos y pequeños aerogeneradores que transforman la energía eólica en electricidad para uso doméstico», apunta Enrique Corral.

También destaca la figura del operador de maquinaria, en la que se hace imprescindible una formación técnica complementaria y, además, el carné de operador de grúa torre. A este respecto, el director general de la Fundación Laboral de la Construcción sostiene que «no se descarta que en un futuro esta reglamentación se extienda a otras máquinas, de ahí que las empresas busquen a trabajadores cualificados para este tipo de funciones».

Algunas claves para adaptarse a la nueva normativa

La Fundación Laboral de la Construcción ha editado nuevos manuales que abordan materias específicas de este sector.

El mercado de la construcción ya no es el que era. Se ha modernizado, y muestra de ello la da el Convenio Colectivo General del Sector de la Construcción, con el que se plantean nuevas necesidades en este área.

En vista de ello, la fundación Laboral de la Construcción ha ampliado su programa formativo a través de unos manuales sobre materias específicas del sector. Algunos de ellos abordan aspectos relacionados con el trabajo físico, como el manual sobre ‘Funciones del Encargado. La gestión del equipo humano’, elde ‘Operador de grúas móviles autopropulsadas’ o la ‘Organización, planificación y el control de obras y tajos’, dedicado a cómo preparar y llevar a cabo un proceso constructivo.

También ha editado una guía sobre la ‘Calidad y la ISO9000’ y la ‘Implantación de sistemas de gestión de calidad en la construcción’, que hace hincapié en la necesidad de adaptación del sector a los cambios en materia de calidad. Del mismo modo, la Fundación también ha publicado un documento dedicado a la ‘Accesibilidad Universal. Formación para encargados de Obra y Oficiales de Primera’ con el fin de fomentar la construcción de espacios más responsable y para todos.

Los aspectos más arquitectónicos tampoco pasan inadvertidos para el organismo, que ha publicado un manual dedicado al ‘Diseño de interiores’, que trata los factores que más afectan a las reformas de viviendas.

Por su parte, el documento sobre la ‘Interpretación de Planos’ pretende convertirlo en una guía que facilite la comprensión de todo tipo de representación gráfica que pueda aparecer en el día a día del encargado de obra.

Seguridad y salud, aspectos básicos

La Fundación Laboral de la Construcción también ha potenciado el área de seguridad y salud en el trabajo, y lo ha hecho con su ‘Aula Permanente de Prevención’ y con un manual de ‘Nivel básico de prevención en construcción’.

Otros aspectos que se potencian en este sentido es la actividad de determinados perfiles, como lo hace a través del documento dedicado al ‘Técnico superior de prevención de riesgos laborales: especialidad de seguridad en el trabajo’.

Y para abordar los aspectos más importantes para comprender el papel que juega la calidad y el medio ambiente en el sector de la construcción y conocer la normativa relacionada, la Fundación ha editado un manual dedicado a este aspecto.

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