Tipos de coontraoferta

  • La contraoferta pura y dura se centra exclusivamente en un aumento del sueldo, que puede ir del 10% al 100%. Los expertos aseguran que su efecto es pasajero. Sólo funciona cuando la persona está contenta con su trabajo pero se considera muy mal pagada.
  • La contraoferta de clarificación es mucho más interesante porque plantea otros aspectos: un plan de carrera bien definido, horario flexible, formación, un cambio de departamento, la responsabilidad sobre un nuevo proyecto, etc..

Sólo las propuestas que contemplan un conjunto de mejoras en la calidad de vida personal y laboral pueden satisfacer a un profesional a largo plazo.

Lo que has de valorar

Antes de tomar una decisión, hay que estudiar a fondo la contraoferta teniendo muy en cuenta lo siguiente:

  • No se debe aceptar o rechazar la propuesta en el mismo momento en que se hace, es necesario tomarse un tiempo para reflexionar.
  • Hay que poner en un lado los motivos que nos llevan a marcharnos y en el otro las mejoras que nos proponen. Así podremos sopesar hacia dónde se decanta la balanza.
  • Si lo que te impulsa a marcharte es el desacuerdo con la filosofía de trabajo de tu empresa, no lo pienses más: vete. La política general de una compañía no cambia de la noche a la mañana.
  • Quizá te parece bien lo que te ofrece tu empresa, pero ¿qué credibilidad tiene?, ¿te están engañando? Para evitar sorpresas, deberás conseguir un compromiso por escrito.
  • Lo mismo sucede con la compañía que te quiere contratar. Informáte bien de cómo trabaja, cuáles son sus proyectos y su política de recursos humanos y de si vas a encajar en su forma de hacer las cosas. No todos los cambios de empleo son a mejor.

¿Qué pasa si aceptas?

Siempre hay un antes y un después de la contraoferta, si te quedas en tu empresa tendrás que demostrar con ahínco tu compromiso por la continuidad. Durante un tiempo vas a estar en el punto de mira de tus superiores porque tendrán miedo de que les falles. La empresa debe percibir que su esfuerzo por mejorar tus condiciones de trabajo se ve recompensado.

Y ¡cuidado con los globos sonda! Hay gente, sobre todo profesionales de sectores donde falta personal, que amenazan con cambiar de trabajo para que les suban el sueldo. Mejor no lo hagas: esta estrategia es muy arriesgada, porque si la empresa se da cuenta, ni te aumenta el salario ni te valora como antes.

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