Trabajar o seguir preparándome. Éste es el gran dilema al que miles de estudiantes se deben enfrentar una vez que ven cerca el último año de carrera. Muchos son los que coinciden en decantarse por el postgrado, la mejor herramienta para pisar con fuerza en el panorama laboral español.

El crecimiento que este tipo de programas ha experimentado en el país es considerable, sobre todo por las múltiples ventajas que ofrecen, desde especialización hasta reorientación de una carrera profesional o actualización para no quedarse atrás. Descubre por ti mismo algunas de las razones que avalan la razón de ser de estos cursos.

¿Das el perfil?

Son miles los cursos de postgrado que ofrecen tanto las universidades españolas como las escuelas de negocio por lo que, una vez que te hayas decantado por esta modalidad educativa, deberás empezar con las cribas. La primera decisión que has de adoptar es la dar con la modalidad de estudio que te resulte más interesante. La más clásica es la presencial. Sigue siendo la favorita de los recién titulados ya que ellos, que aún no han ingresado en el mercado laboral, pueden acudir a clase sin problemas durante los cinco días de la semana, tal y como lo hacían durante su paso por la universidad. Dentro de la opción presencial también hay posibilidades para los profesionales en activo, para quienes se diseñan cursos en función de sus horarios. Ésta es la razón por la que los master destinados a trabajadores en activo se suelen impartir las tardes de los viernes y las mañanas de los sábados.

Precisamente los profesionales se suelen decantar además por la opción a distancia, esto es, con clases impartidas a través de libros y documentos que son enviados al domicilio de los alumnos. Pero, sin duda, una nueva metodología es la que se está imponiendo en los últimos tiempos: se trata de la formación virtual, ‘on-line’ o también conocida como ‘e-Learning’. Se trata de una opción adecuada tanto para profesionales que quieren actualizar sus conocimientos académicos como para personas que compaginan estos estudios con otros.

Además de las modalidades elegidas hay que tener en cuenta los perfiles a los que se dirigen los programas ya que puedes dar con dos opciones. La primera es la de los master destinados a recién titulados que necesitan saber todo lo que les deparará el mercado laboral ya que su experiencia en este terreno es nula. Por otro lado se encuentran los programas para profesionales, donde el listón es más alto al tratarse de cursos orientados a reconducir carreras o ponerlas al día.

Un as en la manga

Por la especialización que ofrecen. Ésta es la primera razón que los estudiantes de postgrado aluden cuando se les pregunta por los motivos que les ha llevado a decantarse por este tipo de preparación. Razón no les falta porque el mercado laboral actual demanda profesionales polivalentes pero con un alto grado de especialidad en alguna rama concreta. Gracias a los master los alumnos marcan distancias con respecto a la formación generalista propia de la universidad, lo que les hace ser los candidatos ideales para cualquier empresa en busca de nuevo personal.

Pero no sólo por la formación especializada que ofrecen los master son los grandes favoritos de los universitarios: otra de sus grandes bazas es que preparan a sus alumnos ante el competitivo mundo laboral. Olvídate de pasar horas y horas en un aula tomando apuntes sin más y estudiando a última hora para los exámenes; cuando te decides a matricularte en un curso de postgrado tienes que saber que vas a trabajar duro, muy duro y desde el primer día. Ponencias, ejercicios prácticos, mesas redondas y visitas a empresas, todo ello a un ritmo frenético, marcarán la tónica general.

Sin duda otro de los puntos fuertes que avalan la formación de postgrado es la amplitud de miras que conseguirás profesionalmente hablando. Atrás quedan las clases universitarias en las que el catedrático es el único que expone sus teorías, sus opiniones; en las sesiones de master la bidireccionalidad en la comunicación es lo que se impone ya que tanto valor tienen las explicaciones de los profesores como los puntos de vista de los compañeros de pupitre y más teniendo en cuenta que éstos, en muchos casos, son profesionales con muchos años de trayectoria laboral a sus espaldas.

Poderoso caballero es don Dinero

No hay que llevarse a engaños, un master puede hacer mucho bien a tu carrera profesional aunque en un principio la cuenta bancaria se resienta. El importante esfuerzo económico que implica un programa de estas características hace necesaria la búsqueda de ayudas.

A día de hoy son muchos los centros de postgrado que firman convenios con entidades bancarias y cajas de ahorro con la intención de ofrecer a sus alumnos toda una batería de créditos bajo las mejores condiciones posibles. Todo ello viene a avalar que el postgrado no está reservado a un círculo reducido de privilegiados ya que pueden optar a este tipo de educación todo aquel que sepa buscar y encontrar el crédito que mejor se adapte a sus circunstancias.

Otra opción a tener en cuenta son las becas. Muchas son concedidas por los propios centros de estudio a los alumnos que presenten el mejor expediente académico. Pero no son las únicas porque también prestan este tipo de ayudas otras instituciones como la Administración, las fundaciones, las empresas privadas y los bancos.

Con sus aportaciones económicas el becado puede hacer frente a parte de los gastos derivados de la estancia en una ciudad distinta a la de residencia habitual o a la adquisición del material necesario. También existen ayudas orientadas a dar una oportunidad a todos aquellos que quieren cursar su programa de postgrado en escuelas norteamericanas. Ese es el caso de las Becas Fullbright, que se conceden para cubrir un año académico aunque se pueden renovar según los resultados académicos obtenidos.

Las llaves de acceso al postgrado

Pruebas como el GMAT o el TOEFL, entrevistas y cartas de presentación son algunos de los pasos que habrás de tener en cuenta para abrirte paso en una escuela de negocio.

El primer requisito para acceder a un master, como no podía ser de otra manera, es el de estar en posesión de una titulación universitaria. En función de la temática del programa las escuelas de negocios se decantarán por admitir a titulados procedentes de unas u otras carreras.

Pero con el diploma universitario en la mano no tendrás todas las puertas del postgrado abiertas ya que deberás pasar por distintas entrevistas. La razón es bien sencilla: las escuelas de negocios no sólo andan detrás de personas con una cualificación académica adecuada sino que buscan a estudiantes maduros, que tengan claro que van a tener que trabajar duro para conseguir el título que ofertan.

Además de las entrevistas, las escuelas y centros de postgrado suelen pedir al candidato que redacte una carta de presentación con los motivos que les llevan a demandar alguno de sus programas. Ten en cuenta que no es un requisito secundario sino uno de los más valorados en los procesos de selección ya que las líneas redactadas dicen mucho de la persona que las ha escrito. También es frecuente que se soliciten cartas de recomendación.

Una de las pruebas más comunes en los centros de postgrado es el GMAT (Graduate Management Admisión Test), en la que los potenciales alumnos deberán superar exámenes que miden su capacidad verbal, matemática y lógica. Cada vez ganan más peso los idiomas en los procesos selectivos, razón por la que los centros exigen a sus candidatos la calificación obtenida en certificados como el TOEFL (Test of English as a Foreign Language). La experiencia laboral sólo es demandada en los master ‘executive’.

Criterios para elegir una formación con garantías

Tan importante como dar con el programa que mejor se adapte a tus intereses es encontrar la escuela que mejores oportunidades pueda brindarte. Es una decisión complicada y más teniendo en cuenta el elevado número de centros dedicados al postgrado en España.

Lo mejor para conocerlos es acudir a las sesiones con carácter informativo que se multiplican cuando el curso académico está a punto de finalizar, ya que es la mejor oportunidad para preguntar a sus responsables todas aquellas dudas que planeen por tu mente. Lo que jamás deberás dejar en el tintero es el interrogante dedicado al claustro docente del centro. Busca siempre profesores que no sólo hagan gala de su capacidad como pedagogos sino que también puedan plasmar en las aulas su experiencia profesional cosechada tras años de trabajo. La perspectiva internacional de los docentes es otro valor a tener en cuenta.

¿Y los compañeros?

Los compañeros con los que compartirás pupitre deberán ser otra de tus grandes preguntas. Infórmate sobre su preparación ya que deberás decantarte siempre por programas que admitan a alumnos con el mismo nivel que tú, tanto en lo académico como en lo profesional, para sacar todo el jugo posible a las clases.

Precisamente los alumnos de antiguas promociones pueden ser tu mejor fuente de información sobre los buenos resultados o no que han tenido los programas cursado a la hora de ingresar con mayor o menos éxito en el ámbito laboral. Otra de las cuestiones que deberás valorar son los complementos añadidos a la formación complementaria, esto es, la organización por parte de las escuelas de conferencias, coloquios y mesas redondas que completen tu preparación.

Las prácticas, que no falten

Lo que se busca cuando se opta por un postgrado es adquirir la soltura necesaria para poder ingresar en el mercado laboral sin grandes complicaciones, algo que sólo es posible a través de la experiencia o, en su defecto, por medio de la práctica. Los master son la solución ya que dotan a los estudiantes de conocimientos que les acercan como no lo ha hecho la universidad a las necesidades propias del panorama empresarial.

Dos son las razones que hacen de las prácticas la carta de presentación de estos programas. Por un lado hay que citar la mezcla de horas teóricas con supuestos extraídos de la realidad profesional. El trabajo en equipo donde se fomenta la competitividad y el liderazgo de sus miembros, el ‘role-playing’ o las presentaciones en público son las bazas frecuentes de un curso de postgrado.

La otra razón es que posibilitan la aproximación al mercado laboral al posibilitar a sus alumnos la posibilidad de realizar trabajos en prácticas, una opción especialmente interesada para los recién titulados. En el momento de seleccionar aquellas escuelas que más te interesan has de tener en cuenta si ofrecen o no prácticas en empresas ya que se convierten sin duda en el primer paso para acceder al mercado laboral.

Lo importante en unas prácticas es aprender, razón última de un postgrado. Por eso hay que valorar siempre el prestigio de la empresa en la que se realizarán dichos trabajos, en qué consistirían y la coordinación entre esta compañía y la escuela.

El Espacio Europeo de Educación Superior

El 21 de enero del pasado año España daba un paso más en el Espacio Europeo de Educación Superior al promulgar un Real Decreto por el que establecía la estructura de las enseñanzas universitarias dando forma a los estudios de Grado y Postgrado, que conducen a los títulos de master y doctor. De este modo quedaba establecido que los países firmantes del EEES apostarán por un primer ciclo, las actuales licenciaturas y diplomaturas, y un segundo con el que se obtendrá la titulación de master. El tercer ciclo será el dedicado al doctorado.

Parar acceder a los master, que tendrán una duración que oscilará entre los 60 y los 120 créditos, será necesario que el candidato esté en posesión de un título de primer ciclo. El objetivo de los master seguirá siendo el acercar al alumno a una especialización académica. Para homogeneizar los estudios de los países integrantes del Espacio Europeo de Educación Superior se creó el Sistema de Transferencia de Créditos o European Credit Transfer System, de ahí las siglas ECTS. Siguiendo el modelo imperante en las becas Erasmus se apuesta por una iniciativa que sirva para facilitar el reconocimiento académico de los estudios cursados en el extranjero. En este marco, 60 créditos ECTS representan al volumen de trabajo de un año académico entre enseñanzas teóricas y prácticas, seminarios, trabajos, prácticas, proyectos y las horas de estudio.

Los cambios que introducirá

El Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) es un proyecto que trata de armonizar los sistemas de formación superior de los países europeos, apostando por la movilidad de los estudiantes y titulados del continente. Dio sus primeros pasos el 19 de junio de 1999 con la Declaración de Bolonia, en la que los ministros de Educación de 29 países europeos, no todos pertenecientes a la Unión Europea, defendieron este ambicioso proyecto.

Uno de los puntos fuertes del EEES es la promoción de un programa de créditos que equiparará las titulaciones de todos los países. La fecha límite para su puesta en marcha está marcada para el año 2010. El Gobierno español está adoptando todas las medidas necesarias para incorporarse plenamente y a tiempo.

Tarifas fijas para los cursos

El curso académico 2006-2007 pasará a la historia: será el primero en el que se pongan en marcha los postgrados oficiales adaptados al Espacio Europeo de Educación Superior. Eso sí, tal y como establece el Real Decreto del 21 de enero de 2005, durante un tiempo podrán coexistir tanto los nuevos programas como los hasta ahora vigentes.

El Ministerio de Educación ya ha puntualizado que los ciudadanos que cuenten en este momento con una titulación universitaria conservarán todos sus derechos académicos y podrán acceder a los nuevos programas master. En cuanto a la fijación de los precios de los postgrados Europa está dividida. Por un lado está el caso de países como Alemania, Holanda, Italia y Francia, donde las tarifas son fijadas por las autoridades educativas. En otros, como el Reino Unido, son las universidades quienes tienen la autonomía necesaria para hacerlo.

En España se apuesta por los precios públicos fijados por el Gobierno central y las 17 comunidades autónomas. El Consejo de Coordinación Universitaria ha acordado que los precios de los master oficiales oscilarán entre los 780 y los 1.670 euros. El Ministerio de Educación ha asegurado que apuesta por programas de postgrado con una nueva oferta de becas para alumnos de renta reducida «que complemente la también necesaria política de becas dirigidas incentivar la formación que conduce al doctorado».

Otra de las novedades es un remozado programa de préstamos con devolución condicionada en la renta. «Préstamos que sólo hay que devolver cuando se alcanza un determinado nivel de renta y que suponen un pacto social entre generaciones que se apoyan para poder financiar losestudios de postgrado», destacaba el Ministerio el pasado mes de abril. Iniciativas muy similares a ésta ya se están aplicando en países como Australia, Suecia, Reino Unido, Nueva Zelanda, Holanda, Estados Unidos o Sudáfrica.

Masters para todos los gustos

Sin duda alguna los Master en Dirección de Empresas, los tradicionales MBA, se siguen llevando la palma en la formación de postgrado. Es más, en un estudio realizado por Círculo de Progreso se señala que casi el 60 por ciento de las ofertas que requieren candidatos con formación de postgrado se decanta por esta posibilidad mientras que el 40 restante lo hace por otros cursos de especialización.

La versatilidad es la clave de su éxito, entre otras cuestiones, ya que de sus conocimientos se pueden beneficiar tanto universitarios procedentes de carreras técnicas como de la rama jurídica o social, por ejemplo. No es único el caso del MBA, que puede ser cursado tanto por alumnos de titulaciones englobadas bajo el epígrafe de Ciencias como por aquellos que se decantaron por las incluidas en el de Letras, aunque sí que es cierto que existe una división de programas teniendo en cuenta precisamente la procedencia académica de los estudiantes.

La gestión del personal encuentra su espacio

Liderazgo, decisión y un buen conocimiento de la plantilla contratada son las claves que hacen que este departamento sea el motor de la empresa. Motivar a los empleados, fomentar el trabajo en equipo, dirimir los conflictos internos y dominar los aspectos técnicos y jurídicos que se dan cita en el entorno laboral son algunas de las funciones que realizan los expertos en Recursos Humanos, que han de unir la especialización de su formación con un cierto tacto para contentar a todas las partes.

Estos son algunos de los contenidos que con frecuencia aparecen en el programa de este tipo de master, como también lo hacen los centrados en los aspectos puramente económicos de su gestión del personal o las técnicas de contratación a emplear.

La salud sigue siendo lo primero

Se quejan con frecuencia los alumnos de estos ámbitos de que sus titulaciones demandan cada día más especialización, un valor añadido que no encuentran en las facultades y escuelas universitarias. ¿Dónde dar con él? Sin duda en la amplia programación de postgrado.

Existen programas para cubrir todo tipo de inquietudes, desde los centrados en la medicina tropical, así como en la deportiva, en la nueva biotecnología, en la gestión de la industria farmacéutica y química, la nutrición, la dirección de servicios sanitarios y así hasta completar un largo etcétera.

Un currículo construido ladrillo a ladrillo

El auge del urbanismo ha conseguido que estos master sean cada vez más tenidos en cuenta por todos aquellos que quieran completar su currículo. La procedencia más habitual de alumnos es de Arquitectura, tanto técnica como superior, así como de Derecho ya que con este tipo de programas se aporta especialización a ambos perfiles.

Dentro de sus temarios, que varían en función de cada iniciativa, puedes encontrar asignaturas dedicadas a la integración de la construcción en el entorno natural o las nociones legales. En este apartado destacan los centrados en la Gestión Inmobiliaria, apto para todo tipo de perfiles.

La promoción se fortalece

Todo es marketing, lo mires como lo mires. La sociedad de consumo del siglo XXI está favoreciendo un campo de trabajo como éste, en plena expansión y del que se espera un continuo crecimiento en los próximos años. En definitiva, las buenas noticias no paran para los universitarios titulados en carreras de corte social y económico ya que son los principales destinatarios de este tipo de curso de especialización.

Si su apuesta por las últimas tendencias aparecidas en el mercado laboral es uno de los puntos fuertes de este tipo de programas también lo es el hecho de que sean muchas las empresas que tengan sus miras puestas en profesionales con un master en marketing en su currículo.

Cuando se habla de marketing se suele caer en el estereotipo de pensar única y exclusivamente en la comercialización de bienes cuando, en realidad, este campo va mucho más allá: en la actualidad es vital promocionar cualquier cosa, desde los servicios de una institución pública hasta las habilidades de las personas.

Esta situación no sólo está abriendo las puertas de los profesionales del sector sino también las de los propios master sobre esta temática ya que no se centran a día de hoy únicamente en el marketing, también abordan otras cuestiones igualmente esenciales dentro de este ámbito como la comunicación o las relaciones públicas.

Master financieros, todo un clásico

Una de las posibilidades tradicionales abiertas a los estudiantes llegados de carreras sociales es sin duda la de las Finanzas. Las amplias salidas laborales que ofrece este tipo de master es uno de los motivos por los que las aulas de las escuelas de negocios que los imparten nunca están vacías, una situación que viene motivada por el hecho de que es difícil copar un ámbito tan extenso como el de la economía, sobre todo por las constantes nuevas oportunidades que genera.

En cuanto a la procedencia de los estudiantes la mayoría lo hacen desde ámbitos como la Economía, la Dirección de Empresas y el Derecho. Los master generalistas en Finanzas son los más abundantes a día de hoy aunque cada vez cobran mayor presencia aquellos otros que se centran en aspectos muy concretos de este ámbito, desde la gestión de carteras hasta el funcionamiento de los mercados bursátiles o la dirección bancaria.

La arquitectura se abre paso

Uno de los master más demandados dentro de la rama técnica son los relacionados con el mundo de la arquitectura. Sus participantes coinciden en señalar que lo aprendido en la carrera no siempre es suficiente para pisar con fuerza en el mercado laboral, razón por la que acuden al postgrado para alcanzar la especialización que les abrirá las puertas del ámbito profesional. Dar con esa ansiada especialización es posible cursando master como los dedicados a la rehabilitación de edificios, la gestión de empresas inmobiliarias, entre muchísimos otros.

El poder de las máquinas

Especialmente para los alumnos de estudios técnicos son los master dedicados a los más diversos aspectos relacionados con las nuevas tecnologías que, aunque hayan sido los últimos en subirse al carro del postgrado, parecen ocupar los primeros puestos en las preferencias estudiantiles.

Con unas oportunidades mucho más estables que las de hace unos años es el momento perfecto para formarse. Además, las nuevas tecnologías son, sin duda, sinónimo de éxito profesional hoy por hoy. Este auténtico yacimiento de empleo echa en falta mano de obra cualificada debido a su juventud, de ahí que el postgrado sea por el momento la única opción, o casi, para preparar a los expertos que el mercado de trabajo demanda.

La formación se viste de verde

El caso de los programas relacionados con la gestión de los medios naturales es bastante particular ya que a ellos pueden acceder tanto alumnos de carreras como Ambientales, Ciencias del Mar, Química o Derecho, en definitiva, que todo dependerá de aquel aspecto que abarquen.

Ya sea la recuperación de los litorales españoles o la legislación en materia medio-ambiental, por ejemplo. Precisamente este tipo de master es uno de los que ha experimentando un fuerte crecimiento en los últimos años tras hacerse patente la presencia de una corriente instalada en todos los ámbitos de la sociedad que lucha por defender y proteger el entorno natural.

A destacar que entre los programas de postgrado centrados en el respeto por la naturaleza se erigen los que están más estrechamente vinculados con las energías renovables partiendo del cambio climático y del paulatino agotamiento de los recursos naturales. Otras áreas son las que están dedicadas al cuidado de los litorales, el derecho medioambiental, el correcto aprovechamiento del agua o la puesta en marcha de las conocidas como ecoauditorías.

Contra la siniestralidad

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales más reciente establece tres niveles formativos encauzados a preparar a estos profesionales. El superior es el más estrechamente vinculado con el postgrado. Se trata de un master, tal y como establece la ley, de 600 horas como mínimo de duración y dirigido a licenciados y diplomados universitarios.

No sólo se distingue a este tipo de programas tanto por su mayor duración con respecto a niveles anteriores o por los requisitos académicos exigidos a los interesados en participar en ellos; también se hace por su especialización. Y es que los Master en Prevención de Riesgos Laborales cuentan con una parte común que está dedicada a las técnicas, instrumentos y metodologías que son empleadas para erradicar los accidentes en los puestos de trabajo, independientemente de la actividad profesional en la que se centren, así como un bloque de especialización que permite adentrarse en unos caminos profesionales u otros. Son tres las vías por las que uno se puede decantar, la seguridad en el trabajo, la ergonomía y psicosociología aplicada así como la higiene industrial.

La fórmula del «tres en uno»

Habría que destacar que uno de los master que más interés viene cosechando es el de Gestión Integrada. Es una de las últimas novedades aparecidas en el mercado educativo de postgrado pero sin embargo ha sabido demostrar en muy poco tiempo el gran tirón que tiene entre los estudiantes de postgrado españoles.

Se podría definir como un programa «tres en uno» que ha sabido aprovechar el tirón de todos los componentes que le dan forman. Su originalidad reside en que a través de un único programa se pueden abarcar las cuestiones propias del Medio Ambiente con otras centradas en la Prevención de Riesgos Laborales y la Gestión de la Calidad en las empresas, en definitiva, un curso dispuesto a formar a los profesionales más completos que el mercado laboral pueda esperar.

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